Fiesta litúrgica que recuerda la acción ritual de la Virgen maría que, como todas las mujeres que habían tenido un hijo, debía realizar en el templo a los cuarenta días del parto.
Se ofrecía un tributo: los pobres una paloma, los ricos un cordero; y se recibía una bendición sacerdotal. (Ver Mariana. Devoción 7)